Fidelidad

DIOS ES FIEL


 
Pero fiel es el Señor, que os afirmará y guardará del mal. (2 Tesalonicenses 3:3)
Veamos las promesas en este versículo bíblico:
Primero,
DIOS ES FIEL. En esta afirmación necesita descansar nuestro corazón. Siendo Dios fiel, la promesa que sigue a continuación va acompañada de pleno cumplimiento.
Dios es fiel y eso basta para creer en todas las promesas que salen de su boca, pues salen también de su recto corazón que nunca cambia.
Por esta razón le digo a mi alma: "Estad fortalecida en el poder de la fuerza del Señor; no te apoyes en tu propia prudencia, sino teme a su santo nombre."
Segundo,
DIOS NOS AFIRMARÁ Y GUARDARÁ DEL MAL.
Es doble promesa:
Nos afirmará.
Esto nos lleva a meditar en nuestras debilidades, en nuestras flaquezas, en nuestras pruebas y luchas; porque en razón de ellas, Dios interviene para mantenernos firmes cada día.
A propósito, el Señor nos dice que debemos padecer un poco de tiempo. Pero después de esto, Él mismo nos perfeccionará, nos afirmará, fortalecerá y establecerá. (1 Pedro 5:10)
Nos guardará.
Dios es específico al declarar sus promesas. Justo cada día nos enfrentamos a situaciones que nos hacen vulnerables o propensos a tambalear. A esto se refiere el Señor, y es precisamente allí donde Él interviene para guardarnos del mal 
Ven por tanto y refugiémonos bajo su regazo. Alabemos su Santo Nombre por cuanto Él NO nos ha desamparado.
 Solo en el Señor podemos vivir confiados,
Son sus promesas motivo de gran gozo.
Nutres de confianza mi corazón quebrantado,
Muchas gracias Señor por estar a mi lado,
Y porque tú eres fiel, de alegría rebozo.
 
Estar en tu presencia es sumamente delicioso,
Tengo la dicha de saber que me has amado.
Tu fiel amor con misericordia has derramado,
¿Cómo no alabarte siempre si eres maravilloso?
 
 






 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Cómo Vencer El Temor

Lo Invisible de Dios

Desde lo Alto

¿ERES O NO ERES?

EL HORNO DE LA AFLICCIÓN

NO SERÁS AVERGONZADO

DE NOCHE Y DE DÍA

¿FE O JUSTICIA?

NO TEMAS...

¡DE TODO CORAZÓN!