Protección
DIOS
CUIDA DE MÍ
Yo Jehová la guardo,
cada momento la regaré; la guardaré de noche y de día, para que nadie la dañe.
(Isaías 27:3)
Dios nos cuida porque sabe
que hay riesgos. Hay muchos peligros y enemigos que asechan nuestra alma para
destruirla. Dios está con nosotros como poderoso gigante para defendernos. Él es
fuerte guerrero. Nadie podrá hacerle frente.
Si Dios cuida de nosotros
eso indica que estamos totalmente protegidos. No solo nos cuida en las noches
cuando los peligros son más inminentes, sino a plena luz del día porque
nuestras capacidades no son suficientes para hacerlo fuera de su cobertura. Sin
su divina protección nuestras armas se hacen inútiles.
Pues… “si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia”
(Salmos 127.1b)
Dios nos riega como se
riega a una planta para que permanezca viva, para que pueda desarrollarse y dar
frutos. Si a cada momento nos riega es porque lo necesitamos. Dios no haría tal reguío innecesariamente; él decide
hacerlo entonces porque sabe cuán frágiles somos y que sin su presencia nos
secaríamos.
Es tal la dedicación del Señor,
que llega a mí para suplir lo vital.
Entonces, si me da lo esencial,
puedo esperar toda su provisión.
proveyendo todo lo que yo necesito.
No me descuida ni un solo instante,
en su presencia no hay riesgos de
marchitarse.
Demos toda la Gloria al Dios bendito,
y vivamos por su Palabra siempre en
victoria.
Comentarios
Publicar un comentario
https://sanidadespiritual.com