Esperar

¡JESÚS LO HARÁ!

 1. Estaba entonces enfermo uno llamado Lázaro, de Betania, la aldea de María y de Marta su hermana.

3. Enviaron, pues, las hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está enfermo.

4. Oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.

5. Y amaba Jesús a Marta, a su hermana y a Lázaro............(Juan 11:1-16)

Un discípulo de Jesús llamado Lázaro estaba enfermo. Jesús lo amaba como amaba a sus hermanas Marta y María, y como ama a todos sus discípulos.

Marta y María enviaron la noticia a Jesús diciendo:

“Señor, he aquí el que amas está enfermo.”

Primero le dicen “Señor”…. Como queriendo decir... ¡Tú tienes poder!

Segundo: “el que amas”…esto sería como decir... ¡Tú tienes compasión y misericordia!

Al oír la noticia, Jesús no se escandalizó ni reaccionó apresuradamente. Él sabía que estaba cerca su hora de ir a la cruz y de ser glorificado...  Y Lázaro podría esperar.

El hecho de quedarse dos días más después de saber la condición en que se encontraba su amigo Lázaro, da la impresión que a Jesús no le interesaba. Pero No, ¡Claro que No! Lo que sucede es que Jesús no se dejaba llevar por emociones, ni nadie determinaba lo que él debía hacer sino el Padre, ¡Su Padre!

Jesús nos permite ver la naturaleza de su carácter perfecto.

Jesús no desatendió lo que estaba haciendo para salir corriendo a la casa de Lázaro. Lo cual tampoco dice que fuera poco importante. Pero recordemos que Jesús tenía una prioridad:  Hacer la voluntad del Padre. (Juan 6:38; 8:29)

Podemos concluir diciendo:

-La enfermedad de Lázaro fue una lección para fortalecer la FE de los discípulos de Jesús, incluyendo la fe de Marta y de María.(1 Pedro 1:7)

-Las acciones de Jesús fueron una demostración de su AMOR que excede a todo conocimiento. (Efesios 3:19)

- La reacción de Jesús fue un acto de JUSTICIA, porque siempre hizo la voluntad del Padre. (Juan 5:3)

 

¿Y qué diríamos de nosotros que vivimos ahora?

¿Acaso estamos exentos de tomar la misma actitud?

Cuando algo sale mal cuestionamos el amor de Jesús,

Y queremos que él nos responda rápido y sin demora.

 

Nadie desea las pruebas aunque sean necesarias,

Pero queremos obtener lo que pedimos sin tardar.

¿Estás dispuesto a soportar de manera voluntaria?

¿O piensas que recibirás tus milagros sin esperar?

 

¿Era muy fácil para Jesús hacer a Lázaro la sanidad?

La respuesta sin duda alguna es Sí.  ¡Absolutamente!

Pero no era la voluntad del Padre definitivamente.

Era más glorioso resucitarle delante de mucha gente,

Creo que fue la razón más importante para esperar.

 

No sé si un milagro esperas que haga Jesús,

O si esperas una respuesta que ha tardado.

Ten presente que aunque Él murió en la cruz,

Con gran poder al tercer día fue resucitado.

 

No desmayes estimado amigo, espera en su bondad

También recibirás su respuesta como no imaginas.

Porque aunque Marta y María solo pedían sanidad,

Jesús las sorprendió con una resurrección divina.