La oración

PERSEVERA EN LA ORACIÓN

   

(Lucas 18:1-8)

Hay ocasiones en que hemos acudido a Dios en oración y al no ver respuesta de manera inmediata o por no recibir lo que hemos pedido hemos desmayado, hemos dejado de orar. Es esta una de las razones por las que el Señor nos ha dejado ejemplos que sin lugar a dudas nos motivan a perseverar en la oración.

He aquí que para recibir justicia de Dios primero debe suceder algo:

1. Debemos ser escogidos por Él

2. Debemos clamar con perseverancia

Dios entonces no se tardará en responder si cumplimos con nuestro deber de orar siempre sin desmayar, ya que nuestra fe es puesta a prueba a través de la perseverancia en la oración.

Podríamos recibir un NO como en el caso de la mujer Cananea  que encontramos en  Mateo 15:21-28 y en Marcos 7:24-30

Sin embargo, debemos continuar orando si estamos seguros que nuestras peticiones son de acuerdo con la Voluntad del Señor. Podemos entonces pedir como lo dice 1 Juan 5:14-15

"Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye."
"Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho."

 
Reconozco mi poca perseverancia al orar,
Y que en mi búsqueda he desistido.
Por eso mi corazón se ha entristecido,
Mas hoy yo determino:
¡Me volveré a levantar!
Hoy tomo la decisión de continuar,
Para obtener lo que Dios me ha prometido.

Pido perdón al señor por mi actitud negligente,
Le suplico que me ayude, no quiero desmayar.
Yo sé que hay respuestas pendientes,
Seguiré clamando y ellas vendrán sin tardar.
¡Oh Dios, que pueda yo orar con la fe suficiente!
Como una hija que te ama y quiere perseverar.