Angustia vs Liberación
¿Por qué hemos de acudir a los hombres antes que a Dios?
¿En quién está puesta nuestra confianza?
Cuando Dios dice que le invoquemos a Él, es en virtud de su amor y de su poder. Es en virtud de ser la única persona que libera legítimamente y para siempre. Creo que, si existiera otra solución más eficaz que la que él nos ofrece, también nos lo diría.
Es por eso que, al estar conscientes de esta realidad, deberíamos acudir a Él e invocar su nombre. Pues, en los hombres no hay ninguna garantía, pero en Dios hay completa liberación.
Dios ya ha dado su palabra de honor diciendo que, si lo invocamos, él nos libra. Solicitemos entonces el socorro del Señor, quien con su gran poder hizo los cielos y la tierra y con ese mismo poder nos libra. Anclemos nuestra confianza en esta infalible promesa.
¿Y qué espera Dios de mí?
En la parte final del versículo dice: “y tú me honrarás” Indicando
esto que, después de haber sido librados de la angustia, Dios
espera que le demos toda la gloria como una muestra de gratitud y fidelidad.
De modo que,
recibiendo ayuda y liberación,
Veremos cumplida la justicia del Dios de amor.
Démosle toda la honra, la gloria y el honor,
Que todos te alaben ¡Oh maravilloso Señor!
¿Cómo no honrar al que vive y me libera?
¿Cómo no exaltar el nombre de un Dios santo?
¿Si atravesando por valles, por montañas y riberas?
¿Dios me ha librado de la angustia y el quebranto?
Entonces te alabaré por siempre amado mío,
Padre eterno y Dios de toda consolación.
A ti rindo mi vida y en tu palabra fiel confío,
Gracias por hacerme libre de toda aflicción.
Comentarios
Publicar un comentario
https://sanidadespiritual.com